La gallina Polish es una raza de gallina originaria de Polonia, conocida por su distintivo copete de plumas en la cabeza y su tamaño pequeño. En este artículo, te contamos todo lo que necesitas saber sobre su incubación y algunas curiosidades sobre esta raza.
Cómo incubar huevos de la gallina Polish
La incubación de los huevos de gallina Polish es similar a la de cualquier otra raza de gallina. Los huevos deben ser recolectados diariamente y almacenados en un lugar fresco y seco, a una temperatura entre 10 y 15°C. Si se va a incubar los huevos de forma natural, se necesita una gallina que los incube durante un periodo de 21 días. Durante este tiempo, la gallina debe estar en un lugar tranquilo y protegido de depredadores.
Si se va a incubar los huevos de forma artificial, es necesario tener una incubadora. La temperatura debe estar entre 37,5 y 38°C y la humedad debe ser del 50% durante los primeros 18 días de incubación. A partir del día 18, la humedad debe aumentar al 70%. Es importante asegurarse de que los huevos estén volteados varias veces al día para que el embrión se desarrolle correctamente.
El tiempo de incubación de los huevos de gallina Polish es de 21 días, igual que para la mayoría de las razas de gallinas. Una vez que los huevos han eclosionado, los polluelos deben permanecer en la incubadora durante al menos 24 horas para que se sequen completamente antes de ser trasladados a un lugar seguro y cálido.
Incubadoras recomendadas
Curiosidades de la gallina Polish
Además de su distintivo copete de plumas en la cabeza, la gallina Polish tiene algunas curiosidades interesantes. Esta raza es conocida por ser muy activa y enérgica, lo que las hace ideales para la cría en ambientes abiertos. Además, son muy inteligentes y pueden aprender trucos y comandos de voz.
A pesar de su tamaño pequeño, las gallinas Polish son muy resistentes y pueden adaptarse fácilmente a diferentes climas. También son muy buenas ponedoras de huevos pequeños, lo que las hace una opción popular para la producción de huevos en granjas.
Es importante tener en cuenta que, debido a su copete de plumas, las gallinas Polish pueden tener dificultades para ver y pueden ser más propensas a depredadores. Por esta razón, se recomienda mantenerlas en áreas protegidas o en jaulas.
En conclusión, la gallina Polish es una raza de gallina muy interesante y distintiva, ideal para la cría en ambientes abiertos. La incubación de sus huevos es similar a la de cualquier otra raza, pero es importante prestar atención a la temperatura y humedad para que los polluelos se desarrollen correctamente. Además, su inteligencia, resistencia y producción de huevos las hacen una opción interesante para cualquier granjero o propietario de aves.